Pregunta a unx organizador sindical: ¿Por dónde empezar?

Estimadxs organizadores sindicales:

¿Por dónde empezar?

Firmado,

Organizadorx Sindical Primerizx

 

Queridx Organizadorx Sindical Primerizx:

En ReproJobs nos hacen esta pregunta muy a menudo. Hemos hablado sobre cómo empezar a sindicalizar el lugar de empleo en varios contextos diferentes, como cuando trabajas para una organización pequeña o estás en pleno proceso de sindicalización y tienes que hablar con lxs recién contratadxs. También tenemos una muy práctica sección de preguntas frecuentes sobre sindicalización que puedes consultar para obtener algunas respuestas rápidas. He pensado darte algunos consejos a partir de mi experiencia organizando dos campañas distintas en dos organizaciones muy diferentes. Antes de entrar en ello, no puedo dejar de insistir en la importancia de establecer relaciones genuinas durante toda la campaña sindical; el éxito se basa en la solidaridad y en un montón de confianza: tanto en el proceso, como en el movimiento y en lxs demás como compañerxs de trabajo. La construcción de relaciones ha sido una parte clave de las dos campañas de las que he formado parte, y las conversaciones que mantengas con tus colegas serán fundamentales para construir esas relaciones, así que en eso me voy a centrar ahora.

Antes de cualquier conversación, debes pensar primero por qué quieres sindicalizarte. Haz una lista. Piensa en todas las razones y en todo lo que un sindicato podría beneficiar a tu espacio laboral. Por lo general, la gente piensa que sindicalizarse es sólo para cuando las condiciones necesitan cambiar urgentemente. Pero también puede ayudarte a conservar aspectos del trabajo que te gustan, así que no limites tu pensamiento a las cosas que cambiarías. Una vez que hayas agotado la lista, empieza a pensar en personas concretas, o personas con funciones similares a las tuyas que también puedan tener muchas de las mismas preocupaciones que tú. ¿Con quién te has desahogado y quién se ha desahogado contigo? Pueden estar pensando lo mismo que tú, y sin saber por dónde empezar. Cuando hayas identificado a algunas personas, inicia conversación haciéndoles algunas preguntas sobre su experiencia en el trabajo, y compartiendo algunas de tus experiencias. Algunas de estas preguntas podrían ser

  • ¿Qué te trajo a la organización?

  • ¿Qué es lo que más te gusta de trabajar aquí?

  • ¿Cómo influye tu trabajo en tu vida personal?

Si hay algo que hay que saber sobre comenzar a organizarse, es que requiere mucha conversación. Muchísima. En las primeras fases, puede resultar difícil saber cómo plantear la cuestión del sindicato a tus colegas. Esto es especialmente cierto si no sabes qué opinan ellxs sobre la cuestión del sindicato. Como ya se ha mencionado, la creación de relaciones es un punto clave para la organización, y ése debe ser tu modus operandi: crear relaciones con tus compañerxs de trabajo. Dependiendo del entorno en el espacio laboral, esto puede resultar fácil de hacer o puede suponer todo un reto. Si trabajas a distancia, o tu lugar de trabajo está compartimentado (los departamentos están casi separados y apenas se mezclan), puede resultar intimidante iniciar conversaciones. En estas conversaciones, trata de identificar los puntos conflictivos o los cambios que mencionan tu compañerxs de trabajo: éstos son puntos de agitación que puedes utilizar para orientar la conversación hacia la sindicalización.

Una vez identificados los puntos de agitación, puedes empezar a hacer otras preguntas, como de dónde piensa tu colega que vienen estos problemas o cuál creen que es la raíz de este asunto. Estas preguntas son formas estupendas de hacerles pensar en sus problemas en un contexto más amplio y en la posibilidad de que las condiciones puedan cambiar. Esto es crucial para construir una visión colectiva con tus compañerxs de trabajo. Si sientes que tu colega está dándole vueltas a la palabra "sindicato", tú dila en voz alta y pasa al tema de la diferencia sindical. Asegúrate de que sepan que el sindicato estaría formado por colegas y pregúntales cuán diferente creen que sería el trabajo si lxs trabajadores tuvieran más voz en las decisiones que se toman.                                                                                 

Recuerda que la mayoría de lxs empleadores dudan de los sindicatos porque están desinformados y porque los sindicatos cambian fundamentalmente la dinámica de poder entre empleadores y empleadxs. Incluso puedes cuestionar las decisiones recientes que ha tomado la dirección y poner sobre la mesa las formas en que estos cambios te han afectado a ti (o a ellos).

Siendo honestxs, puede que las conversaciones iniciales con tus compañerxs de trabajo ni siquiera incluyan la palabra "sindicato", puede que simplemente se centren en establecer relaciones, ¡y eso está muy bien! Si tu conversación se queda sin decir esa palabra, puedes prever un seguimiento informal con ellxs para continuar la conversación. Es más o menos como entablar conversaciones sobre el aborto. No dudes en explicarles las protecciones federales en torno a la sindicalización; éstas pueden aliviar mucha ansiedad en torno a todo el proceso.

Sindicalizarse es un proceso abrumador y necesitas gente dispuesta a ponerse las pilas y hacer el trabajo. Tras hablar con la gente e identificar a quienes tengan interés en implicarse más, reúnete en algún momento fuera del trabajo para discutir cuáles serán los siguientes pasos, y eso incluye decidir con qué sindicato organizarse.

Uno de los obstáculos más complicados al comenzar el proceso de sindicalización es iniciar las conversaciones, pero créeme que los beneficios superarán cualquier ansiedad que esto conlleve. Esas conversaciones iniciales son los cimientos de un movimiento mayor que tú y tus compañerxs de trabajo están iniciando, y sobre el que seguirán construyendo hasta que hayan conseguido la sindicalización. ¡Felicidades y buena suerte!

Salud,

Jorie Lane